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El Comité de
Reconstrucción del Partido Comunista de Bolivia, saluda alborozado la victoria
alcanzada por los trabajadores y las masas populares de Grecia que, en medio de
una grave crisis económica y políticas antipopulares impuestas por gobiernos
anteriores bajo la egida de la Unión Europea, permitieron que TSIPRAS Y SYRYSA
obtengan el triunfo electoral en un contexto de confrontación interimperialista
abierta por la hegemonía y el nuevo orden mundial.
Sin duda alguna
se ha abierto una brecha importante en el campo de los países de la Unión
Europea, la cual dependiendo de muchos factores de cohesión en la línea de confrontación revolucionaria
en contra del imperialismo, puede permitir que los trabajadores y las masas
populares griegas avancen hacia la senda
de la revolución democrática y popular en la perspectiva del socialismo
científico.
Los comunistas y
revolucionarios del mundo, consecuentes con el internacionalismo
proletario, no podemos dejar de pronunciarnos
y apoyar moralmente la acción heroica de los trabajadores y las masas populares
de Grecia, porque ellas fueron quienes tuvieron la idoneidad de avanzar con
denuedo y resolución combativa sembrando el camino para el triunfo electoral de TSIPRAS y SYRYSA. Estos
últimos aprovecharon la oportunidad
política, encausando el descontento popular en contra de los gobiernos pro
imperialistas y antipopulares del pasado, hacia la vía electoral, tal como
sucedió en nuestro país después del octubre rojo del 2003.
Hasta donde
sabemos, TSIPRAS y SYRYSA aglutinó en su seño a diversas tendencias políticas e
ideológicas, desde algunos comunistas, maoístas, trotskistas, socialdemócratas,
ecologistas o medioambientalistas, y otros. Nos imaginamos que las condiciones
y peculiaridades de la lucha política en Grecia, permitieron la conformación de
esta alianza en una coyuntura electoral para hacer frente a la reacción y al
imperialismo.
Consideramos que
la lucha de los trabajadores y masas populares de Grecia continuaran de manera
incansable y persistente la lucha antiimperialista y revolucionaria mas allá de
simples reformas al viejo Estado de Grecia, pues no es concebible ninguna
transición pacífica al socialismo científico si no está precedido de una revolución capaz
de derrocar al viejo orden estatal destruyéndola y sustituyéndola por un nuevo
Estado. Lo contrario será desembocar en reformismo, populismo y retórica
antiimperialista, o en su caso, puede permitir la articulación política de la
reacción y las bandas fascistas que en el pasado campearon libremente
agrediendo y reprimiendo a los
trabajadores y al pueblo de Grecia. La
experiencia de la lucha revolucionaria de los trabajadores y las masas
populares del mundo nos enseña así.
La reacción, el
imperialismo, principalmente el imperialismo yanqui y la Unión Europea, harán
lo posible por todos los medios para atenuar o neutralizar al gobierno de TSIPRAS
y SYRYSA; las tendencias ideológicas proburguesas del posmodernismo y sus
variables decolonialistas, multiculturalistas,
heterodoxos, neomarxistas, marxistas-antimarxistas, medioambientalistas, ONGs financiados por el imperialismo, los posibilistas y otros, también
harán lo posible para desviar el curso político de la lucha de las masas de sus
objetivos revolucionarios, para degenerar en procesos reformistas encandilando
a las masas con medidas de radicalización de la democracia liberal burguesa
(como sucede en algunos países de América Latina), pero ultraconservadores de
la estructura económica burguesa. Sin embargo, los comunistas bolivianos
estamos firmemente convencidos que los trabajadores y las masas populares de
Grecia, así como lo demostraron en el pasado en su lucha contra de los gobiernos antipopulares y
proimperialistas, y en contra de las bandas fascistas, no transigirán y
proseguirán impetuosamente con la lucha revolucionaria hacia sus objetivos estratégicos
de clase.
Comisión Política
Partido Comunista de Bolivia
Comité de Reconstrucción
Bolivia 28 de enero de 2015.
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